Tigres de Cristal

Toni Hill

El punto de partida de Tigres de Cristal es el acoso escolar, los abusos o los malos tratos, pero sobre todo, habla de los remordimientos, la culpa y la hipocresía que cualquier situación como esta generarán más tarde o más temprano.

Pero como es lógico, a mí, y a cualquier persona de Sant Ildefons o de Cornellà, este libro ya nos llamaba la atención antes de empezar a leerlo, porque la mayor parte de la historia transcurre en el barrio hace cuarenta años, en lo que todo el mundo conocía como la Ciudad Satélite, y sucede entre chavales como –años arriba o abajo- era también yo en aquél momento.

Eso sí, la novela de Toni Hill es una gran historia en sí misma, independientemente de como nos identifiquemos con su escenario y de la familiaridad con lugares y situaciones que nos transmite. Es muy rica, es impactante y atrapa, quizá porque esa temática más social se mezcla con una trama de novela negra. Y porque nos hace pensar en nuestro pasado, en las cosas que vimos y vivimos como adolescentes, y que de adultos resultan ser todavía mucho más duras y crudas.