2.887 sanciones en Cornellà por el incumplimiento de las restricciones para evitar la COVID-19

La Guardia Urbana de Cornellà, la Policía Nacional y los Mossos han levantado 2.887 actas por el incumplimiento de las restricciones relacionadas con la prevención de la COVID-19 desde el 16 de marzo, con la declaración del estado de alarma, y ​​cuando se hizo efectivo el Decreto municipal de medidas excepcionales relacionadas con esta situación de alerta sanitaria.

Del total de actas, 1.720 han sido levantadas por la Guardia Urbana, 1.103 por los Mossos y 64 por la Policía Nacional. Cabe destacar que las actas se envían directamente al Ministerio del Interior que determina, tipifica y gestiona las sanciones que deben interponerse.

Cerca de 400 de estas sanciones se han impuesto en el mes de mayo ya durante el inicio del desconfinamiento progresivo, a personas que no cumplen las medidas de seguridad decretadas (mantener la distancia, salir en las franjas horarias correspondientes, etc. ) para evitar un rebrote de los casos de contagio de la enfermedad. Sólo este fin de semana, la Guardia Urbana ha levantado 24 actas a adultos, 2 a menores, y 1 a un establecimiento comercial.

Campaña de inspección en los comercios, establecimientos de servicios y de hostelería

Desde el 4 de mayo, los comercios y locales de servicio de menos de 400 metros cuadrados pueden abrir al público. La medida, incluida dentro de la fase 0 del plan de desescalada aprobada por el gobierno español, también permite la recogida de productos en los comercios con cita o pedido previo, y la recogida de comida para llevar en los bares y restaurantes de la ciudad.

Un equipo de 10 técnicos del Ayuntamiento de Cornellà, que actúa según las directrices de los departamentos de Salud, Actividades y Guardia Urbana, ha realizado inspecciones en todos los que han optado por abrir para informar a los comerciantes de las medidas concretas que deben adoptar. Los establecimientos deben aplicar una serie de medidas de higiene, seguridad, aforo y prevención encaminadas a reducir el riesgo de la propagación de la COVID-19 entre la ciudadanía y entre el personal, según el decreto aprobado por el gobierno central.

En las visitas del equipo técnico del Ayuntamiento de Cornellà comprueban que se cumplen estas normas por parte de todos y también revisan los bares y restaurantes que pueden abrir para preparar comida para llevar, para asegurar que las condiciones del personal, de cara a los clientes y de manipulación son las adecuadas.