Declaración institucional del Ayuntamiento de Cornellà ante el cierre de sucursales bancarias en la ciudad
En relación con el cierre de sucursales realizadas por parte de diferentes entidades bancarias en nuestra ciudad, y teniendo en cuenta la repercusión que tiene entre la población de mayor edad y los colectivos sin acceso a recursos digitales, los grupos municipales del Ayuntamiento de Cornellà manifestamos nuestra preocupación y profundo desacuerdo, por las dificultades de acceso y aislamiento social que implica esta decisión.
Debemos tener en cuenta que la reducción de oficinas físicas significa que las personas usuarias deben realizar desplazamientos más largos en muchos casos para acceder a ellas. Las personas de mayor edad, además, pueden tener problemas al realizar trámites on-line, dada su falta de formación o por no disponer de dispositivos informáticos, aumentando así, la brecha digital. Esta situación puede condicionar la necesidad de la ayuda de familiares o personas cercanas para realizar estos trámites, disminuyendo su autonomía y privacidad, quedando desamparadas las personas que no disponen de esta red.
El Ayuntamiento cuenta con servicios de apoyo para reducir la brecha digital entre las personas mayores, mediante servicios a diferentes equipamientos públicos y formaciones específicas en Citilab y otras dependencias, pero es una herramienta de apoyo que no puede ni debe abarcar la falta de un servicio necesario, las personas deben tener garantizado el derecho a los servicios bancarios con independencia de sus habilidades digitales y del núcleo o localidad donde vivan.
Los grupos municipales del consistorio, mediante esta declaración institucional, expresamos nuestra preocupación y nuestro rechazo a esta situación e instamos a las entidades a revisar sus protocolos de atención al público, y especialmente a las personas mayores, personas que durante muchos años han depositado sus ahorros y confianza en estas entidades.
Como Ayuntamiento instan al Gobierno del Estado y al Gobierno de la Generalitat a impulsar medidas para que las entidades financieras ofrezcan unos servicios personalizados mínimos que garanticen la igualdad de acceso a todas las personas a los servicios bancarios y eviten la brecha digital.