Crear magia comunitaria

Cuando te encuentras personas con una sensibilidad especial es fácil conectar rápidamente y, cuando además, su generosidad se transforma en un proyecto solidario y comunitario, la afinidad se convierte en complicidad.

Eso es lo que sucede con María Rascón y su proyecto “Mil y una Nineka” que este año celebra su quinta edición con una nueva exposición en el Castell con cerca de 1.500 ninekas, cada una de ellas única, y que están a la venta para contribuir a una causa solidaria: la lucha contra el cáncer infantil.

Con su proyecto, María ha sido capaz de transformar su dolor en creatividad y la adversidad en su compañera de viaje.  Las manos de las ‘ninekaires’, que a lo largo de estos años la han acompañado, consiguen en cada edición crear un ambiente de magia  e ilusión. Este año, las ‘ninekas’ son unas hadas que han llenado las salas del Castell de colorido y calidez. Os animo a visitarla y a adquirir una de estas hadas que hacen magia de verdad.