La educación, clave de nuestro futuro
Estamos inmersos en plena campaña de jornadas de puertas abiertas en los centros educativos de la ciudad, aunque por las circunstancias de la pandemia, están realizando visitas virtuales o presenciales con grupos reducidos. Pero el objetivo sigue siendo el mismo, dar a conocer las instalaciones y los sistemas pedagógicos que cada uno desarrolla.
Aprovecho la ocasión para hacer una mención especial al esfuerzo y el trabajo que toda la comunidad educativa está realizando en el período que estamos viviendo. El inicio de curso, en plena crisis de la Covid-19, ponía bajo la lupa las circunstancias en las que se desarrollarían las clases y cómo iría evolucionando en cuanto a sistemas de prevención, contagios, etc. En estos momentos, podemos constatar por los meses que han pasado, que se han controlado tanto los espacios físicos: con nuevas formas de entrar y salir de los centros, la higiene y la organización de aulas y espacios; como la adaptación del profesorado y alumnado a la nueva realidad, siendo un buen ejemplo de cómo hay que actuar, puesto que la propagación del virus en las aulas ha sido poca. Evidentemente, ha sido trascendental, porque no podíamos permitirnos la pérdida de la presencialidad con lo que ello conlleva.
Educar es una labor compartida que involucra a toda la comunidad: administraciones, profesorado, familia y ciudadanía en general. Esta corresponsabilidad es básica para progresar como sociedad, y en estos momentos mucho más. Debemos trazar un camino más allá de las aulas, desde una concepción de la educación transversal e integral. Desde el gobierno municipal lo hemos tenido siempre muy claro y trabajamos para impulsar políticas encaminadas a potenciar el aprendizaje en todas las etapas vitales y ofrecer servicios y recursos más allá de la educación obligatoria.
En tiempos difíciles como los que vivimos, la educación es clave para afrontar el futuro y para hacer que nuestra sociedad sea cada vez más igualitaria. Este año hemos aprobado unos presupuestos muy prudentes y hemos tenido que poner el punto de mira en todas las circunstancias derivadas de la Covid19. Pero también teníamos muy claro que había áreas en las no íbamos a reducir ni un céntimo, y una de ellas era la de educación. Mantenemos todos los recursos y servicios municipales y hemos aumentado la partida de inversiones para tener en buenas condiciones todos los centros en cuanto a instalaciones y también en limpieza y desinfección.
El éxito o el fracaso de una sociedad se miden por el grado de talento, de educación y de capacidad de empatizar y trabajar en comunidad. Como decía el pedagogo Paulo Freire: ‘ la educación no cambia el mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo”.